Al atender a niños en la Unidad de cuidados intensivos pediátrica (PICU, por sus siglas en inglés), usamos directrices que nuestro equipo creó que se centran no solo en los resultados médicos inmediatos sino también en las facultades cognitivas y la función a largo plazo.
Para garantizar que estemos siempre un paso adelante en la atención neurológica y el monitoreo neurológico en la PICU, nuestro equipo de atención neurológica crítica prueba y emplea nuevos dispositivos, capacita médicos clínicos en su uso y los implementa en los protocolos de atención. Los dispositivos incluyen:
Debido a que los niños en la PICU tienen riesgos de complicaciones neurológicas, se les realizan constantes monitoreos por EEG para registrar la actividad cerebral. Esto es especialmente útil para detectar crisis no convulsivas que de otra manera no se pueden ver, para poder tratarlas inmediatamente.
Nos complace anunciar que agregamos 6 camas especializadas para atención crítica neurológica en junio de 2020. Estas camas permiten que las enfermeras y los doctores puedan coordinar fácilmente la atención y las conversaciones sobre tratamiento entre múltiples especialidades que trabajan juntas para tratar la afección de su hijo.
Nuestro equipo de atención neurológica crítica se reúne regularmente en conferencias, encuentros y rondas para hablar sobre niños que podrían tener problemas que afectan la función cerebral y también sobre aquellos que fueron diagnosticados con este tipo de trastornos. Estos especialistas integran su experiencia en neurología, neurocirugía, accidentes cerebrovasculares, neurorradiología intervencional, neuroanestesia y atención crítica en un plan integral de atención para pacientes compartidos.
Tradicionalmente, los niños realizan seguimiento con su pediatra después de que mejoran y dejan la PICU. Sin embargo, ahora sabemos que el desarrollo y el regreso a la vida normal de los niños pueden verse afectados por una hospitalización por una enfermedad crítica. Estamos desarrollando un modelo único en el cual los pacientes de atención crítica neurológica reciben el seguimiento de un neurólogo y un equipo especializado.
Nuestro equipo ha desarrollado un programa de accidentes cerebrovasculares pediátricos multidisciplinario con un equipo de especialistas que tienen la experiencia y el conocimiento necesarios para diagnosticar, tratar y controlar accidentes cardiovasculares en niños de forma adecuada.
Stanford Medicine Children's Health es el único hospital en el norte de California que cuenta con el instrumentador quirúrgico robótico ROSA™ para neurocirugías pediátricas, que reduce el tiempo de anestesia, aumenta la precisión y mejora la seguridad.
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