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Una vez que se programa la cirugía, se le dará información específica sobre a qué hora llegar para la cirugía y en dónde. También se comunicará con usted nuestro departamento de anestesia para hablar sobre el plan de anestesia de su hijo y responder cualquier duda que pueda tener. Se le entregará un espirómetro de incentivo a su hijo (un dispositivo para ayudar a mantener los pulmones sanos después de la cirugía) para practicar ejercicios de respiración profunda antes de la cirugía. Se le entregarán instrucciones para que su hijo inicie un tratamiento moderado con laxantes el día anterior a la cirugía para ayudar a prevenir cualquier molestia que pueda sufrir debido al estreñimiento postoperatorio.
Se le darán toallitas antisépticas para limpiar el pecho de su hijo la noche anterior a la cirugía y la mañana de la misma para ayudarle a reducir el riesgo de desarrollar una infección.
Para la mayoría de las reparaciones de tórax en embudo o tórax en quilla, los pacientes deberían esperar una hospitalización de cuatro a siete días. Podrán comer y moverse inmediatamente después de la cirugía. Durante la hospitalización, los objetivos de la atención serán los siguientes:
Su hijo será dado de alta una vez que esté bien controlado su dolor y se pueda mover de forma independiente. Se le entregarán ejercicios para ayudarle a su recuperación en casa. Las incisiones necesitarán de cuidados mínimos. Normalmente veremos a su hijo al mes, a los tres meses, a los seis meses y al año de la alta para seguimiento. Entonces acordaremos el seguimiento anual de la cirugía para evaluar la evolución de su hijo y hablar sobre el momento oportuno para extraer la barra.
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