Displasia acetabular

¿Qué es la displasia acetabular?

La displasia acetabular, o displasia de la cadera, es un trastorno que se genera cuando el acetábulo (cuenca de la cadera) es hueco y no brinda suficiente cobertura para la cabeza femoral (bola), lo cual provoca falta de estabilidad en la coyuntura de la cadera. Con el tiempo, esta falta de estabilidad provoca daño en el labrum y el recubrimiento cartilaginoso de la articulación, lo cual puede provocar dolor y el desarrollo de osteoartritis precoz de la cadera.

La displasia acetabular puede ser el resultado de una dislocación de la cadera (DDH, por sus siglas en inglés) en el desarrollo que fue tratada en la niñez. Por lo tanto, los niños que reciban tratamiento para displasia de la cadera deben recibir seguimiento muy de cerca por parte de un médico hasta que sus huesos se hayan desarrollado por completado. La displasia acetabular puede darse como un leve problema que puede tardar años o hasta décadas en manifestar síntomas. Los pacientes que hayan sido diagnosticados con displasia acetabular suelen tener un historial familiar de osteoartritis precoz de la cadera o displasia de la cadera.

acetábulo

La flecha roja señala el lugar donde hay displasia acetabular presente en la cadera derecha. El acetábulo no brinda suficiente cobertura a la cabeza femoral, lo cual provoca una falta de estabilidad en la articulación de la cadera.

 

¿Cuáles son los síntomas de la displasia acetabular?

Los síntomas de la displasia acetabular podrían incluir:

  • dolor en la parte frontal de la cadera o ingle
  • dolor en los músculos alrededor de la cadera
  • sensación de inestabilidad o de que la pierna o la cadera “ceden”

¿Cómo se diagnostica la displasia acetabular?

La displasia acetabular se diagnostica detenidamente por medio de distintas pruebas:

  • alcance de movimiento general de la cadera durante la flexión, extensión y la rotación interna y externa
  • observación del andar
  • fuerza y reflejos musculares
  • prueba de aprehensión anterior positiva: prueba la inestabilidad de la cadera cuando está extendida y rotada hacia afuera.
  • prueba de impacto anterior positivo: prueba la irritación del labrum acetabular cuando la cadera está estirada y rotada hacia adentro
  • pruebas por imágenes: las radiografías y las pruebas de resonancia magnética muestran distintas vistas de la cadera, el grado de displasia y el daño al cartílago y el labrum

¿Cuál es el tratamiento de la displasia acetabular?

El tratamiento preferido para adolescentes y adultos jóvenes con displasia acetabular es la osteotomía periacetabular (OPA), un procedimiento quirúrgico que permite volver a posicionar el acetábulo en una posición más estable en que brinda una cobertura más apropiada de la cabeza femoral. La operación OPA mejora la función de la cadera, reduce el dolor y frena el avance del daño dentro de la coyuntura.